Historia del yoga

YOGA DEL CUERPO – HISTORIA DEL YOGA PT.2

Ya hablamos sobre el origen del yoga como una práctica principalmente enfocada en la meditación. Pero ¿cuándo surge el yoga del cuerpo o las asanas? Sigamos con la historia del yoga

 

Por muchos siglos el Raja Yoga o yoga de la mente se concentró en prácticas como la meditación como técnicas en el camino hacia la liberación. El Raja Yoga surgió como una filosofía dualista: dividía de manera tajante el cuerpo y la mente. El cuerpo era considerado como un obstáculo que debía superarse para poder liberar a la mente. Fue mucho más adelante, gracias a la influencia del pensamiento tántrico, que surgió el Hatha Yoga o el yoga del cuerpo. Un Yoga que buscaba incluir el cuerpo en la búsqueda espiritual. 

 

¿Por qué considerarlo como un obstáculo si el cuerpo puede ser un vehículo que nos acerque a la libertad? 

 

Los Hatha Yoguis se dieron cuenta que a través de las prácticas corporales podían afinar sus sentidos para percibir al mundo y a sí mismos de una manera más clara y precisa. En la práctica de Hatha Yoga el cuerpo se transforma de ser un lastre, a ser el catalizador de un proceso de autoconocimiento y transformación. 

 

Así el Hatha Yoga y el Raja Yoga juntos constituyeron un camino completo que abrazaba a la mente y al cuerpo en un mismo método para salir de la ignorancia espiritual o avidya y poder abrir los ojos y percibir al verdadero Ser.

 

Hatha Yoga en Occidente

 

Sin el aspecto filosófico, mental y espiritual, las técnicas del cuerpo pierden su sentido más profundo.”

 

El Hatha Yoga o yoga del cuerpo incluye prácticas como asanas, pranayama y kriyas para purificar al cuerpo y convertirlo en un instrumento muy preciso de percepción. El Hatha Yoga sabe que el cuerpo es simplemente una expresión más de nuestra mente, y que al trabajar directamente sobre el cuerpo, podemos transformar quienes somos. Pero no se debe perder de vista que las técnicas de Hatha Yoga deben complementarse con el Yoga de la mente o Raja Yoga. Sin el aspecto filosófico, mental y espiritual, las técnicas del cuerpo pierden su sentido más profundo. 

 

Las asanas o posturas de yoga ayudan al cuerpo a mantenerse ágil y despierto. Al practicar asanas, sincronizando cada movimiento con la respiración, estando conscientes del contacto de los pies con la tierra y de la acción de la gravedad, la práctica se convierte en una meditación en movimiento. No importa si las posturas son muy complejas o no, lo que importa es cuál es la experiencia del yogui al practicarlas. Eso es Hatha Yoga: la experiencia interna, no la externa.

Kinetika Yoga te brinda una práctica profunda que no pierde de vista el equilibrio entre el cuerpo y la mente como parte de un TODO. El resultado: BIENESTAR INTEGRAL.

YOGA DE LA MENTE- HISTORIA DEL YOGA PT1

¡Bienvenido/a a nuestra primera entrada del blog! Aprendamos juntos sobre la historia del yoga…

Aunque pareciera que la historia del yoga se inicia en las playas de California y se continúa en You Tube y en Instagram, la realidad es que la historia del yoga tiene sus inicios un poquito más atrás. Digamos que hace MILES de años, literalmente. ¿Cómo es que ha sobrevivido tanto tiempo esta disciplina mientras otras han quedado en el olvido? ¿Qué tiene el yoga que nos habla a todos por igual, desde los indios de hace 4,000 años hasta a los yoguis de hoy en día?

 

Los inicios.

En 1921 un grupo de arqueólogos encontró, en lo que hoy es Pakistán, un sello del dios Pashupathi. Este mostraba una figura sentada en una postura yóguica rodeada de diferentes animales, como si estuviera meditando. Los historiadores lo interpretaron como que alguna forma de yoga se practicaba desde antes del 2000 a.C., o sea, hace más de 4000 años.

 

Obviamente que el yoga que se practicaba hace 4000 años no tiene mucho que ver con lo que hoy en día se enseña en el gimnasio de la esquina. El yoga más antiguo es el Raja Yoga o el yoga de la mente, que no incluye posturas o asanas. Este tipo de yoga se concentra en prácticas como dhyana o meditación. Siglos después surgió en India el Hatha Yoga, que incluye al cuerpo en el camino a la transformación completa del ser.

 

Raja Yoga.

La filosofía del Raja Yoga se centra en el concepto de sufrimiento o dukha. Parte del supuesto de que en la vida es inevitable el sufrimiento. Sufrimos porque no podemos tener una vida perfecta como la quisiéramos tener. Porque hay enfermedades, hay pérdidas y al final, todos los seres vivos tenemos que morir.

 

“No es una religión: no requiere que tengamos fe, sino que es una técnica que nos lleva a darnos cuenta de cómo funciona nuestra mente.” 

 

El yoga entonces surge como un camino a seguir para salir de ese sufrimiento inherente a la vida. Convirtiéndose entonces en un camino hacia la liberación. El yoga es un método que nos lleva a ver el mundo y a nosotros mismos de una manera diferente. No es una religión: no requiere que tengamos fe, sino que es una técnica que nos lleva a darnos cuenta de cómo funciona nuestra mente. 

 

El resultado de la práctica de yoga es experimentar la realidad como un todo interconectado del cual nosotros somos sólo una pequeña parte. Esta percepción abre nuestro corazón a incluir a todos los seres vivos y reduce el miedo a la muerte y la soledad.

 

Yoga en occidente.

Cuando a principios del siglo XX el yoga llegó a Occidente, trajo consigo muchas técnicas: algunas tenían que ver con el cuerpo, otras con la respiración, otras con la mente y la filosofía. Sin embargo, desde los años noventa a la fecha, el aspecto puramente físico del yoga se ha puesto de moda. Han surgido cientos de escuelas y métodos de yoga, cada uno interpretando las asanas o posturas a su manera. El detalle está que en la mayoría de estas escuelas se olvidaron que el Hatha Yoga o el yoga del cuerpo siempre se practicó en India de la mano del Raja Yoga o el yoga de la mente. 

 

“una técnica para entrar en contacto con nuestro ser real”.

 

Es un hecho que el yoga te hace más saludable pero ese no es su objetivo último. No hay que perder de vista que el yoga surgió como un camino a la liberación; una técnica para entrar en contacto con nuestro ser real, ese que no está sujeto a cambios, el ser que lo observa todo, en eterna quietud. Está bien pararse de manos, pero el objetivo real del yoga va mucho más allá de eso. Recuerda que si no te sientas a meditar y a observar e indagar dentro de ti mismo, entonces las posturas o asanas se convierten en una serie de acrobacias sin sentido que no se distinguen de lo que haría un atleta o un cirquero.

 

En Kinétika Yoga siempre hemos buscado no perder de vista la esencia del yoga, lo que lo hace ser Yoga y no una disciplina más que te lleve a la salud.